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Libre, como Ambuila que escapó de su prisión y en un Ferrari va

  • Foto del escritor: Lobotomía
    Lobotomía
  • 15 may 2020
  • 2 Min. de lectura

Mayo 15/2020

Columna #10


Familia Ambuila invita a concierto vía live, Concierto para delinquir

La familia Ambuila, capturada el pasado 28 de marzo de 2019 por vinculaciones al caso de lavado de dinero en Buenaventura (donde además, varios funcionarios de la Dian salieron salpicados por favorecer el contrabando) fue puesta en libertad luego de que un juez dictara vencimiento de términos.

El caso de los Ambuila salió a la luz luego de que Jenny Ambuila Chará compartiera a través de sus redes sociales, fotografías donde exhibía algunos bienes como carros, ropa y accesorios lujosos. Tras una investigación de la Fiscalía, se dio a conocer que los padres de la joven le giraban grandes cantidades de dinero desde el exterior, que no coincidían con los ingresos que adquirían a través de sus empleos en Colombia.

Omar Ambuila, el padre de Jenny, se desempeñaba como jefe de control de carga en la Dian de Buenaventura; se calcula que sus ingresos no superaban los diez millones de pesos mensuales (COP $10’000.000). Desde que inició el proceso, Omar estuvo preso en la cárcel de Villanueva, mientras que Jenny y Elva (madre de Jenny) tenían casa por cárcel. Pese a que la familia fue puesta en libertad, sigue vinculada al proceso.

 

Ay Jennysita Jennysita, los seguidores en Instagram le pesaron más que su vida de lujos. El narcisismo y ese afán por mostrar lo superior que es a la gente que se gana el sueldo con sudor y lágrimas la llevaron cuesta abajo, y bueno, bien dicen “el que tiene plata marranea” además si uno gana millonadas en el camello no tiene nada de malo mostrar en qué se gasta esa plática, la vaina es que sumercé no trabajaba. Si tan solo se hubiera quedado quietica en redes, anduviera en su ‘lambo’ tranquila de la vida.

No podemos contar con nuestras manos la cantidad de parlanchines en cargos públicos que se han tapado en plata ilegalmente, hoy están en sus casa disfrutando del champán y su Cordon Blue. Todo gracias a ese gran amiga de la que todos hablan: La libertad por vencimientos de términos¹. ¿Y si nos hacemos los maricas por 240 días para que nos den la libertad y cada uno para la casita?, después miramos si retoman el caso o no.

¿A quien debemos pagarle para que se reabra un caso? o ¿nos debemos conformar con que los corruptos se sigan robando la plata? bueno, no robando, siguiendo el ejemplo de Jesús, pero en lugar de convertir el agua en vino, ellos convierten el sueldo de 10 millones en 480 palitos para la mesada de la niña.


¹El vencimiento de términos en los procesos es una garantía procesal cuyo fin es evitar que se prive de la libertad a una persona procesada, cuando a los sesenta días desde la imputación de cargos no se haya presentado al juez un escrito de acusación


Lobotomía


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